Este juego es rápido y divertido. Es a partir de 5 años pero puede adaptarse a diferentes edades a que hay una versión para más mayores.
Debemos tirar el dado y coger una ficha al azar. Dependiendo del número que nos indique el dado, podremos hacer una acción u otra. Si nos toca un cinco… ¡Mala suerte! nos quedaremos sin poder coger una ficha. Pero si nos toca un seis… ¡Enhorabuena! podremos coger al azar una cabeza, un cuello, una tripa y unas piernas (¡las fichas estarán bocabajo!).
Así podremos trabajar la frustración.
¿Qué más cosas trabajamos con este juego?
Conceptos de espacio-temporales, atención, turnos, memoria, razonamiento matemático, búsqueda visual, categorización, creatividad, descripciones, lenguaje, habilidades sociales…
Los juegos dan para mucho y los niños y niñas pueden aprender mucho jugando.